En la soldadura MIG se utilizan siempre materiales de aportación, mientras que en la soldadura TIG se puede o no utilizar. Las mejores propiedades de la junta soldada en lo que se refiere a la resistencia, corrosión y ausencia de fisuras, se obtiene cuando se usan estos materiales.
No existe una norma general para la elección de los materiales de aportación debido al tipo de utilización y al parámetro que interese más en cada caso. Las de alto contenido en magnesio AlMg dan mayor resistencia, mientras que la de AlSi es más resistente a la fisuración y proporciona mejor flujo de metal durante el proceso de fusión de las aleaciones templables.
Este tipo de aleaciones (AlCu - AlMgSi - AlZn), no se deben soldar con material de aportación del mismo grupo de aleación por el proceso de fisuración. En el caso de que el material se vaya a anodizar posteriormente a la soldadura, se evitará el material de aportación AlSi porque cogerá en la zona de soldadura un color muy oscuro.
Con el fin de reducir el peligro de la corrosión bajo tensión y aumentar la resistencia, se ha añadido Cu a las aleaciones de AlZnMg. Al hacer esto también empeora la soldabilidad. Diversas investigaciones señalan que se puede añadir como máximo 0,2% de Cu, antes de que el peligro de fisuración en caliente aumente considerablemente. Se elige en este caso el AlSi .
LIMPIEZA ANTES DE SOLDAR
La limpieza antes de la soldadura es esencial para conseguir buenos resultados. La suciedad, aceites, restos de grasas, humedad y óxidos deben ser eliminados previamente, bien sea por medios mecánicos o químicos. Para trabajos normales de taller se puede elegir el siguiente procedimiento:
1º Eliminación de la suciedad y desengrasado en frío con alcohol o acetona.
2º Lavar con agua y secar inmediatamente para evitar el riesgo de oxidación.
3º Eliminación mecánica mediante:
- Cepillado con un cepillo rotativo inoxidable.
- Raspado con lija abrasiva o lima.
- Por chorreado.
Cuando hay demandas más exigentes respecto a la preparación, se puede realizar una limpieza química según el esquema siguiente:
- Eliminación de la suciedad.
- Desengrasado con percloroetileno a 121°C.
- Lavado con agua y secado inmediato.
- Eliminación del óxido de aluminio de la siguiente forma:
- Limpieza alcalina con NaOH.
- Limpieza ácida con HNO + HCl + HF.
- Lavado con agua y secado inmediato.
- Neutralización con HNO (después del tratamiento con NaOH).
- Baño en agua des-ionizada.
- Secado inmediato con aire caliente.
No se debe nunca prescindir de la eliminación del óxido o el desengrasado en el área de soldadura, aunque a veces genere un alto costo.
No existe una norma general para la elección de los materiales de aportación debido al tipo de utilización y al parámetro que interese más en cada caso. Las de alto contenido en magnesio AlMg dan mayor resistencia, mientras que la de AlSi es más resistente a la fisuración y proporciona mejor flujo de metal durante el proceso de fusión de las aleaciones templables.
Este tipo de aleaciones (AlCu - AlMgSi - AlZn), no se deben soldar con material de aportación del mismo grupo de aleación por el proceso de fisuración. En el caso de que el material se vaya a anodizar posteriormente a la soldadura, se evitará el material de aportación AlSi porque cogerá en la zona de soldadura un color muy oscuro.
Con el fin de reducir el peligro de la corrosión bajo tensión y aumentar la resistencia, se ha añadido Cu a las aleaciones de AlZnMg. Al hacer esto también empeora la soldabilidad. Diversas investigaciones señalan que se puede añadir como máximo 0,2% de Cu, antes de que el peligro de fisuración en caliente aumente considerablemente. Se elige en este caso el AlSi .
LIMPIEZA ANTES DE SOLDAR
La limpieza antes de la soldadura es esencial para conseguir buenos resultados. La suciedad, aceites, restos de grasas, humedad y óxidos deben ser eliminados previamente, bien sea por medios mecánicos o químicos. Para trabajos normales de taller se puede elegir el siguiente procedimiento:
1º Eliminación de la suciedad y desengrasado en frío con alcohol o acetona.
2º Lavar con agua y secar inmediatamente para evitar el riesgo de oxidación.
3º Eliminación mecánica mediante:
- Cepillado con un cepillo rotativo inoxidable.
- Raspado con lija abrasiva o lima.
- Por chorreado.
Cuando hay demandas más exigentes respecto a la preparación, se puede realizar una limpieza química según el esquema siguiente:
- Eliminación de la suciedad.
- Desengrasado con percloroetileno a 121°C.
- Lavado con agua y secado inmediato.
- Eliminación del óxido de aluminio de la siguiente forma:
- Limpieza alcalina con NaOH.
- Limpieza ácida con HNO + HCl + HF.
- Lavado con agua y secado inmediato.
- Neutralización con HNO (después del tratamiento con NaOH).
- Baño en agua des-ionizada.
- Secado inmediato con aire caliente.
No se debe nunca prescindir de la eliminación del óxido o el desengrasado en el área de soldadura, aunque a veces genere un alto costo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario